Bueno, estoy en casa, después de el intento fallido de conseguir empleo en el INE, he emprendido la intención de seguir buscando (no hace falta decir que es un deber). En fin, pero para esto pues sigo pensando muchas cosas de muchas otras ideas, ya saben, regreso a esa idea del pasado y la cambio o la mejoro, luego me cuestiono a mi mismo y me juzgo, y al final me arreglo.
Pero bueno, pensaba mucho sobre las ideas, las lógicas y las ideas interconectadas, sobre la coherencia que deben de guardar y también sobre la conexión que deberían de tener según mis principios y valores.
Todo es lo que es
Entonces pensé sobre la idea de la revista de Scientific American acerca de si la realidad es una simulación, y me permiti argumentar que independientemente de si ello fuera posible, la realidad percibida debería ser coherente con la realidad de existencia de las cosas, es decir que todo lo que nuestra capacidad sensorial tiene debería guardar lógica con la lógica misma del todo que nos rodea, y si ello se rompiera, el sistema definido sobre la lógica de las cosas empezaría a fallar.
Es decir, la forma de entender que algo es real es mediante los sentidos, y también mediante la capacidad que tenemos para reconocer "existencia", si eso se pierde podríamos argumentar que todo podría fallar.
La Incoherencia del Vaso Rojo
Pero bueno, esa idea viene porque alguna vez, talvez metido en mis pensamientos pero también bien concienciente del entorno, comiendo con mi mamá ví el vaso rojo del que bebía moverse sin ninguna explicación lógica.
Entonces, para ello pensé en muchas posibilidades pero lo que más guardé fue que ello no sería coherente con la realidad de cómo deben suceder las cosas, y qué por lo tanto, la cantidad de posibilidades para que esa circunstancia pasará tendría que generar un problema de información que rompiera la coherencia y la lógica a nivel más profundo.
Pensé, imagino entonces que puede haber circunstancia que no tengan una explicación lógica pero éstas deben ser analizadas con cuidado porque la perturbación de una realidad serían como el ladrillo quitado de un espacio de interacciones infinitas, no sé si me explique muy bien en esto.
Sin contar con todas las demás cosas que pasan.
En fin, creo que es un tema sencillo envuelto en complejidad necesaria.
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