Como ya lo había dicho, he estado un poco enfermo, y bueno, estoy en el proceso de recuperación. Hace unos días mis papás y yo íbamos a Cuautla, y me surgió la pregunta directa que le hice a mi papá, que era algo así como: ¿Usted está más de acuerdo en el pensamiento de México y Estados Unidos en unión o bien cómo otros piensan (tal vez relacionado por una cultura en la que siempre subsiste el pensamiento de la perdida del territorio) en que México es muy independiente de Estados Unidos?
Lo primero que me contestó fue la importancia del comercio, del valor económico, y pude saber, que al igual que yo, la relación debe ser más profunda.
Acerca de las cuestiones de cierto tipo de resentimiento de Mexicanos contra Estados Unidos se me hacen un poco sobrevaloradas. ¿El por qué? Porque creo que los beneficios son evidentes. Gran parte de Mexicanos viven en US y, con esto se genera una mejor calidad de vida para muchas familias mexicanas, también muchas inversiones y empresas aquí están enfocados en el mercado comercial de Estados Unidos.
Bueno, esa fue una parte introductoria para lo que el día de hoy platicaba con mi mamá. Desayunabamos y como casi siempre, al final converso con ella.
Le mencionaba acerca de la importancia de la educación, de cómo la única manera de tener un cambio real en el desarrollo de México proviene de cambiar en cómo son educadas estas generaciones y las siguientes, porque lamentablemente, venimos de una cultura un poco violenta (por la Conquista, la Inquisición, la Independencia, la Revolución, Las Guerras por el Poder), entonces parte de esta vida del México moderno que se revuelve entre civilidad y violencia son derivados de procesos históricos de un país que se constituyó así, un poco a la fuerza, un poco con gusto. ¿Cómo cambiarlo desde otro enfoque? Es evidentemente que desde las consecuencias o reflejos que siempre han persistido no es la manera, en mi consideración, si se puede cambiar la forma en que las personas están educadas, también se puede cambiar la forma en que crean relaciones sociales, económicas, jurídicas y de civilidad.
Pensé, una sociedad bien educada no necesita más que su habilidad para poder crear cosas que mejoren el desarrollo. En los beneficios de un apuesta por la educación se crearán los medios para que se vayan mejorando aquellas partes del sistema con deficiencias. El ejemplo que le puse a mi mamá fue un poco rústico, pero creo que ejemplificaba muy bien la situación, le dije algo así como: imagina que viene una gran empresa y pretende invertir 10 millones de dólares para una fabrica que hace productos enlatados derivados del nopal (Tlayacapan y Tlalnepantla son lugares conocidos por tener uno de los centros más grandes de cultivo de nopal), pero resulta que no hay ingenieros para hacer la planta, tampoco hay abogados, ni existe el sistema jurídico ni económico para poder realizar tal inversión, la inversión por lo tanto se vuelve inviable. Es por ello que en la medida en que el nivel de educación mejore, los resultados serán la creación de sistemas más robustos, mejor ordenados y más eficientes para la creación y replicación de mejores modelos de desarrollo.
Y bueno, pensé también, pero en México casi siempre, ese tipo de acciones son muy acotadas, los presidentes casi siempre buscan la recompensa inmediata, es decir, los logros sexenales antes que los planes de largo plazo, porque la Educación es una apuesta de muy largo plazo, y evidentemente, la retribución que espera un presidente de la sociedad casi siempre se espera al momento. Tal vez esté plan tendría que enfocar sus esfuerzos en, independientemente de las fuerzas políticas, mantener el objetivo educativo, dejar un poco más abierta la relación de la empresa privada con las encomiendas actuales del Estado, y dejar a este más enfocado en temas más esenciales o de largo plazo. ¿Por qué? Porque como ya lo he comentado, México ha sido enmarcado en tener ese matiz violento, que debido a lo ligado con la cultura es muy difícil de cambiar, por lo que la mejora en el sistema educativo y también en el institucional actual es muy importante.
¿Pero cómo ponerse de acuerdo, para que independientemente de la fuerza política gobernante estos objetivos no se abandonen?
Creo que debería haber partícular interés en esto por parte de Estados Unidos y México, porque el futuro, enmarcado por un cambio total en las relaciones económicas, sociales y jurídicas, cambios tecnológicos, cambios en el procesamiento de la información, y surgimiento de nuevas tecnologías cómo la IA, la integración más profunda es necesaria, pero para ello también es necesario hacer un poco "más parejo" el campo, en que las diferencias culturales no sean motivo de separación, sino más bien, permitan encontrar identidad pero también crear los mecánicos necesarios para tener valores en común, que nos permitan podernos ver cómo sociedades integradas para un futuro mejor.
Ahora bien, entonces se debería empezar por preguntarnos, ¿cómo generamos ese cambio para crear una educación más completa, y a la vez generamos una visión de largo plazo?¿Cuánto tiempo es necesario para realizar esto, 30 años? ¿Cómo estandarizamos el modelo que se necesita hacer?
Tal vez, solo sea mi percepción, pero esto es importante.
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