Es temprano en la mañana y mi mamá me ha dado un sermón acerca de mi falta de interés por hacer las cosas; tiene razón, yo también no estoy a gusto con este periodo, muchas cosas me dan pereza, estoy buscando un sentido más preciso de lo que quiero, y estos días, después de fallar en Cuautla, y no molestar más a Bem, han sido pesados. Tenía ya bastante tiempo que no me sentía sin una relación, y bueno, es extraño, en primera porque yo no esperaba estar “soltero”, y en segunda porque realmente no me incomodaba estar en “algo”, lo disfrutaba y siempre me sentí a gusto (no estoy seguro sí Bem compartía esto porque, en las últimas veces que pregunte me pareció entender que la emoción no se compartía).
Cambié de empleo, porque pensé que esto me ayudaría a tener más tiempo para hacer algunas cosas pendientes de la universidad, pero en verdad no lo estoy aprovechando como debería, y bueno, también hice el cambio porque lo de Cuautla sí me jodió, esperaba mucho y el resultado fue “terminar todo”.
Hace unos días fue mi cumpleaños, y esa semana literalmente casi me muero, aunque cuando estaba casi sin aire, no tenía miedo, más bien estaba seguro que solo era el momento (había salido y regresando agarré un árbol y no sé qué me picó, después no podía respirar ni moverme, mis papás me llevaron al médico).
No creo que esto sea un proceso sencillo, siempre me he considerado una persona muy libre, y bueno, ahora más, pero, hice muchos planes que fallaron, y no con esto quiero justificar mi mal comportamiento, únicamente estoy buscando una nueva manera de ver las cosas.
Bueno, al menos he notado que Bem está bien, en cierta medida eso me reconforta, estábamos trabajando juntos en Latidito, pero bueno, ese proyecto nunca lo deje de pensar en hacerlo con Bem como pareja, y ahora, estoy seguro que él bien podría continuarlo, pero yo lo dejé porque sabía que sería complejo trabajarlo en esta distancia. Por cierto, hace unos días lo revisé, y vaya que estaba hecho todo un rompecabezas, no sé muy bien qué le hizo, pero le escribí algunas cosas por Messenger, de las cuales me arrepentí, porque sentí que sonó muy rudo. No le comenté más y él tampoco respondió.
Volviendo un poco a lo de mi anterior trabajo, lo extraño pero a la vez, recordar los últimos días me trae una sensación de melancolía.
No estoy seguro porque escribí todo esto, tal vez solo estoy justificando que yo seré el tío alcoholico y cínico de la familia (al menos en esto momento así van las cosas).
No hay comentarios:
Publicar un comentario