La tarde de las luciérnagas

 No recuerdo si quería perderme un poco más o regresar. Ya en la tarde, no sabía bien dónde estaba, pero ya llevaba varias horas así.

Se hacía de noche, y tal vez, en cierto momento, el más complicado, en el que no sabía bien ya qué hacer, en ese campo, las luciérnagas empezaron a salir conforme la tarde terminaba y la noche empezaba. Eran tantas, todo se iluminaba una y otra vez en distintos puntos. Un tiempo estuve trabajando en una cafetería que tenía unas luces que siempre me recordaban a esa tarde-noche, por los focos que utilizaban para su iluminación.

Esa experiencia nunca la olvidaré, tal vez, porque es algo que nunca había visto antes, pero me imagino que quién ha estado por allí es algo común. 

Bien, ahora recuerdo ese momento un poco más complicado, tal vez en cierto momento yo solo quería estar solo, lo más alejado posible de la gente. Salí hacia la avenida en Patriotismo y caminé aún, tomé el metro en Chapultepec, y me bajé en Copilco. Aún así seguí caminando hasta casa. 

En ese preciso momento supe que tal vez nunca estábamos solos del todo.

Ya había querido escribir sobre esto en ocasiones anteriores. Creo que mucho tiempo no tuve con quien platicar lo que pensaba o sentía. Ahora tal vez, no me preocupa tanto, ya que he sabido entenderme mejor, pero muchas veces necesitamos a alguien, no porque esa persona nos vaya a rescatar, sino porque muchas veces necesitamos un cuestionador del orden, alguien que pregunté el porque de nuestro orden de ideas. 

Cuando iba a la Facultad, conocí a una persona que después se convirtió en mi amiga, Ame, creo que con ella conocí a Janis Joplin.

Creo que deberíamos hablar más de los "Core Values". Bueno, es que recordaba que siempre se me aconsejaba a ser más precavido con las personas, porque la malicia es imperante. ¡Claro!(Ahora pienso, ¡ese solo era un correo!¡Solo era un p!), cuántos errores asumí por mi falta de atención a ese detalle, pero bueno, ahora he entendido como es que se ata uno más a un mal futuro entre peor actuemos. Creo que muchas personas no se han dado cuenta de ello.

Ya lo había hablado antes, es como la tinta que oscurece el agua, cómo el color que se agrega y cambia todo.

Y en otro cambio del orden de ideas, soñé y era consciente que soñaba; así, miraba por la ventana y pensé: seguro si me aviento de aqui no me pasa nada porque pues, ¡estoy soñando!

Después de una gran escena entre saberme soñando y continuar jugando en el sueño, pensaba: ¡ya me tengo que despertar!. Y me ví rompiendo todas las barreras de diferentes espacios. ¡Qué sueño!